La mítica Atlántida, la legendaria isla supuestamente desaparecida en el mar, podría haber sido localizada gracias a Google Ocean (el gemelo marino de Google Earth).El descubridor ha sido Bernie Bamford, un ingeniero aeronaútico inglés que ha analizado con este software de Google una zona cercana a las Islas Canarias, área donde se supone que la isla pudo hundirse tras una espectacular explosión. Gracias al satélite de Google Ocean, Bamford afirma que, a unos mil kilómetros de la costa occidental de Africa, se puede observar claramente un rectángulo (ver las imágenes). Esta formación podría tener el tamaño de Gales, y estaría a unos cinco mil metros de profundidad. ¿Imaginación?¿Certeza?
Difícil de saber.
1 comentario:
Bueno, lo cierto es que la gente de Google parece haberse hartado de recibir llamadas de freakies reclamando ser los primeros en descubrir la Atlántida, y publicaron el siguiente aviso:
"what users are seeing is an artifact of the data collection process," Google said. "Bathymetric (or seafloor terrain) data is often collected from boats using sonar to take measurements of the seafloor. The lines reflect the path of the boat as it gathers the data."
Por supuesto los irreductibles ya han proclamado que Google es parte de la conspiración de la CIA y el Vaticano para mantener oculta la Atlántida, pero lo más gracioso es que además se están enfrentando en la red por la paternidad del descubrimiento, y por la localización, porque resulta que el fondo marino de GE tiene más de una cuadrícula sospechosa, y cada freaky busca la suya para plantar su bandera y reclamar la propiedad intelectual (¿Estarán pensando en edificar?)
Y no sólo eso, algunos EXIGEN que los científicos manden inmediatamente expediciones a buscar los restos atlantes. ¿Saben de verdad estos señores lo que significa la frase "5000 metros de profundidad"?
Es cierto que todos se rieron de Schliemann cuando dijo que encontraría Troya, pero eso no significa que baste con hacer el payaso y convertirse en objeto de burla para convertirse en un célebre arqueólogo: además hay que encontrar Troya
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