Según cuenta Emil J. Blasco en ABC, se han descubierto entre cristianos del Líbano unas marcas específicas de ADN propias de habitantes de Europa Occidental. De esta forma se ha podido trazar, por primera vez, el itinerario genético de una de las migraciones más peculiares de la Historia. Así, queda demostrado que los Cruzados no sólo llevaron la religion a aquellas tierras sino también perpetuaron su herencia genética. Este avance se encuadra dentro del estudio patrocinado por National Geographic y realizado por Spencer Welles. En el proyecto participan también varios investigadores españoles como David Comas y Jaume, del Departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud de la Universidad Pompeu Fabra, de Barcelona.
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